Eso son org ias, todos con todos

Lo que mi madre o la tuya piensa del mundo liberal no es tan alejado de la realidad. Te lo cuento.

Hay más lindeces del estilo. A saber:

  1. Hay prosti tuci on y dro gas.

  2. Hay E T S a saco.

  3. Esta es muy buena: “Tú vas a un club y fo llas, supongo”.

  4. Se hacen todo tipo de prácticas se xua les y nosotros somos muy normales. La gente tiene mucha destreza fo llan do.

  5. La gente es guapa y está muy buena. No se va a fijar nadie en nosotros. Seguro que no hay gente de nuestra edad.

  6. Será muy frío, esto es ir a fo llar a saco… A nosotros nos gusta más poder conocer un poco a las otras personas primero. Y ya si congeniamos pues cumplir nuestras fantasías (bicuriosidad, prácticas a 3 ó 4, pasar un fin de semana intercambiados…).

Y hay muchas más.

Si de alguna te das cuenta ahora, porque la piensas cuando estás leyendo esto o porque has oído a alguien hablar del intercambio de parejas y opinar de ello sin haberlo probado, me puedes contestar esta TriSletter, que la añado a la lista y hablamos de ello.

Por supuesto el título es una de las mejores, junto a la de “tú vas a un club y fo llas, supongo”.

A mí esa me encanta. No sé la de veces que la he escuchado ya cuando sale el tema con conocidos o gente random.

Bien. Te voy a contar la primera vez que fuimos a un club de intercambio de parejas:

Llevábamos tiempo meditándolo. Meses.

Y eso que no había especial “miedo”. Porque los dos lo teníamos más que claro. Ya pensábamos así. Ya me entiendes, que nos gustaría mucho hacer y probar cosas que no podríamos hacer los dos solos.

Sólo imaginar lo que podría salir de ahí y lo mucho que mejoraría nuestra vida sexual, que no era muy paradita.

Pues eso, que no éramos unos sosos.

Planeamos con tiempo una escapada. No podía ser en nuestra zona.

Elegimos Madrid. Por todo. Porque es la mejor ciudad para plantearse una escapada así, y porque tiene el que por aquel entonces era el mejor local liberal de España.

No es que haya dejado de serlo, simplemente es que hace muchísimos años que no hemos vuelto a ninguno, pero ya te contaré porqué.

Preparar ese viaje no era elegir hotel, que también, y local. Era ir con los deberes bien hechos. Ya teníamos la forma de contactar con más gente que pensaba como nosotros y lógicamente no desaprovechamos la ocasión.

Fue un finde en el que conocimos a un chico y además fuimos al local. No nos volvimos a casa con nada pendiente. Si algo teníamos claro es que las locuras hay que hacerlas del tirón, porque es como se disfrutan.

En el local íbamos hechos unos flanes. Bueno, en este caso yo iba hecho un flan. No me acojonaba, pero quería que todo saliese perfecto y que estuviésemos a gusto en todo momento.

La chica de la puerta nos atendió muy bien, todo hay que decirlo. No hemos vuelto a ver esas relaciones. También es que llegamos demasiado pronto, estábamos prácticamente solos.

Local enorme y vacío que nos enseñaron y no tardamos mucho en quitarnos la ropa. Para ponernos una toalla que te dan, no para lo que piensas.

Lo que piensas empezó a pasar sobre la 1 de la mañana. No se hizo esperar.

Mañana te lo cuento, que se me hace la TriSletter muy larga. Pero ya te adelanto que algunas de las creencias mencionadas al principio te van a sorprender. Para bien y para mal.

Mañana a la misma hora.

Feliz día,

Triscadores.